Cómo aplicar el método Montessori en casa sin tener material y desde el minuto cero
- Deja que explore el entorno con total libertad, esto es positivo para el desarrollo del niño aunque puede ser estresante para ti . Es importante que prepares tu casa bloqueando todos los peligros que pudiese encontrar, (esquinas, enchufes, cosas a mano que se pueden romper y cortar, escaleras, etc). No esperes que llegue el momento en el que empiece a moverse, asegura todo mientras es un recién nacido. Puedes pensar que ya tendrás tiempo de hacerlo, pero cuando menos te lo esperas tendrás a un pequeño o una pequeña exploradora por casa descubriendo lo que su cuerpo puede hacer y lo que sus manos pueden alcanzar.
- Sé justo con él y aprenderá a serlo con los demás.
- Haz que se sienta seguro, así confiará en los demás.
- Haz que se sienta necesario. Hazle partícipe de las tareas del hogar acordes para su edad. Permitir al niño que haga las tareas de casa hará que seguridad en sí mismo y también buscará el amor en el mundo y no se conformará con menos.
- No le critiques o aprenderá a juzgar a los demás. No hay niños malos al igual que no hay padres perfectos. Busca la forma de entender porque esa actitud y ayúdale. Sé su guía de la vida. Puede que para ello tengamos primero que aprender nosotros a canalizar nuestras frustraciones. Esto último no es fácil, y si además tienen hermanos es casi inevitable compararles, pero tenemos que entender que son personas diferentes y cada uno llevará su propio ritmo y tendrá su propia personalidad.
- No lo ridiculices o formarás una persona tímida.
- No hables mal de tu hijo delante de él. Y tampoco cuando no está.
- Acepta sus ideas y opiniones para que aprenda a sentirse bien consigo mismo.
- Escúchale siempre y respóndele con coherencia cuando te pregunte.
- Cuando hables al niño, hazlo siempre con respeto y mostrando la mejor versión de ti.
Esto puede ser muy difícil al principio cuando vienes de una educación tradicional, incluso puede que te vengan consejos de ese tipo de educación que hará que dudes en muchos momentos si educar en la pedagogía de María Montessori es realmente efectiva.
Estas dudas e inseguridades son completamente normales. Somos madres y padres intentando hacer una educación desde el amor. Por eso no te angusties si un día no eres esa madre o padre que soñaste. Acepta tu error, perdónate y sé humilde con tus emociones y con tus hijos. Ante todo no te olvides que somos humanos y lo importante no es la meta sino el camino hacia ella.